6 ene 2008

Muse


3 ene 2008

MUSE - BLACK HOLES AND REVELATIONS





Black Holes And Revelations es el nombre de la cuarta producción del conjunto británico Muse que salió el 3 de julio de 2006. El nuevo álbum del grupo de Matthew Bellamy tiene singles como Supermassive Black Hole, Knights of Cydonia y Starlight.

Aunque lo suyo les ha costado, pasito a pasito, Muse han ido abriéndose un camino entre los grandes nombres. Las continuas referencias a Radiohead o su supuesta pretenciosidad no fueron obstáculo para que disco tras disco, el trío británico fuese escalando hacia cotas insospechadas de popularidad. Siete años después de darse a conocer con aquel majestuoso ‘Showbiz’, vuelven a la carga con un trabajo que ha vuelto a exprimir las capacidades de Matthew y los suyos en busca de alcanzar otro nivel.

Este, su cuarto trabajo de estudio, sigue la línea estilística de su anterior disco, Absolution, con un estilo musical menos agresivo y mucho más oscuro, además de contar con letras más ideológicas que en sus dos primeros trabajos. En este nuevo disco tienen cierto sonido urbano, como pone de manifiesto la canción "Supermassive Black Hole", en la que se acercan bastante al sonido de grupos como Franz Ferdinand; sin embargo, Bellamy asegura que siempre le gustó ese estilo y que ya tenía pensado desarrollarlo antes de haberles oído.

Su obra Absolution les dio el reconocimiento mundial que se merecían, y fue seguida de una larga gira mundial que tuvo su punto álgido en el festival de Glastonbury '04. Una fecha histórica en la trayectoria de la banda pero también funesta, ya que al terminar el concierto el padre de Dom Howard, asistente al festival, fallecía a causa de un ataque al corazón. El batería meditó abandonar Muse, pero gracias al apoyo de sus compañeros se mantiene en el seno del grupo.

En Black Holes And Revelations siguen presentes las referencias contrarias a la guerra y a la destrucción, de hecho la portada es una alegoría de los Cuatro Jinetes del Apocalipsis ante un paisaje marciano. Musicalmente hablando, Muse se mantienen en la linea de combinar piezas enrevesadas con otras mucho más directas y efectivas, en contraposición a un trabajo tan barroco como fue Origin Of Symmetry.

“Black Holes And Revelations” se sale de la tónica habitual del sonido de Muse. Deja de lado ese rock de tinte oscuro al que tantos se aficionaron para dar paso a unos sonidos que se acercan más a algunas bandas de música electrónica de los ochenta e incluso a un pop no excesivamente profesado por ellos. Este comportamiento, puede que provoque reacciones adversas ante sus seguidores de siempre, pero ese es un riesgo que ya sabían que iban a correr. Muse han tratado de reinventarse a si mismos, con lo malo y lo bueno que eso conlleva, apostando por reciclarse e intentando ir un poco más allá, tarea que hay que saber como mínimo valorarles por su osadía.

El grupo ha hecho declaraciones para la MTV diciendo que espera que el cambio y mezcla de géneros musicales del nuevo disco no asuste a sus fans “El material es una mezcla “muy drástica” de estilos musicales; algunas pistas rozan el “jazz melódico” mientras que otras son el extremo opuesto del espectro, algo así como un “rock salvaje basado en el groove, influenciado por Prince”. El trabajo del influyente compositor italiano Ennio Morricone (’El bueno, el feo y el malo’, ‘Los intocables’) inspiró el tono de la canción ‘The Knights of Cydonia’ (Los caballeros de Cydonia). Y en ‘Take a Bow’, que pide a los líderes mundiales que se responsabilicen de sus acciones, Muse atraviesa tres escenarios musicales: comienza con una pieza clásica antes de pasar a una sección central techno y un final de rock apocalíptico”.

Un primer single “Supermassive Black Hole” ya ponía el grito en el cielo de crítica y afición, aunque “Knights of Cydona”, el segundo single extraído del álbum, daba alguna esperanza en demostrar que seguían siendo en el fondo los Muse de siempre. Pero en general, la estructura y estilo del disco, va por unos derroteros totalmente distintos a su sonido de siempre, abriendo con “Take a Bow”, sintetizadores, teclados y guitarras acompañan al quejumbroso grito de Mathew Bellamy, y siguiendo con temas como “Starlight” que suena totalmente setentero, “Hoodoo” a lo Depeche Mode y “Supermassive Black Hole”, que es como un pupurri mega bestia de instrumentación y guitarras metálicas, un caos sonoro adulcorado por toques folkys.

El disco comienza con "Take a bow", un tema colosal de intensidad progresiva con adornos electrónicos al estilo "Bliss" incluídos. Una melodía de sintetizador preside gran parte del tema hasta el apoteósico final. Inmejorable.

Tras el espectacular inicio se nos presenta "Starlight", otro sensacional corte destinado irremediablemente a convertirse en himno del grupo (otro más). Muy acertada la melodía de bajo de Wostenholme que dota al tema de una rítmica muy adictiva, acompañada a veces por acordes de piano. Preciosa melodía vocal a lo largo de todo el tema, con un estribillo colosal.

Después tenemos el que fué primer single,"Supermassive Black Hole", un tema claramente con tintes comerciales, muy rítmico y bailable, con un excelente riff de guitarra como esqueleto de la canción. Lejos de decaer la intensidad del disco, este tema la eleva con su dosis de bailoteo discotequero, un sonido algo oscuro, y notables influencias de Prince y grupos tecnodark a lo Rob Zombie.

"Map Of The Problematique" eleva definitivamente la categoría del disco a obra maestra, y eso que aún queda más de la mitad. Un tema un tanto oscuro y melancólico, con influencias de Depeche Mode, aunque con menos electrónica de la que parece. Esto es una constante en todo el disco, realmente sonidos electrónicos no hay demasiados y la sensación se debe a un uso inteligente de los instrumentos tradicionales (como también hace, a su manera, Tom Morello, ex Rage Against The Machine y actual guitarrista de Audioslave).

"Soldier's Poem" es un bello y delicado tema, más parecido a un interludio que a una canción propiamente dicha, ya que dura dos minutos excasos. Una melodía muy bonita, coros preciosos, y una lírica al nivel de todo el disco, un tanto pesimista en este caso: "And you think you deserve your freedom,No I don't think you do,There's no justice in the world,and there never was".

Le sigue "Invincible", que comienza con una sensible melodía estilo "Soldier´s Poem", que va aumentando progresivamente de intensidad hasta terminar en un solo de desvaríos psicodélicos impecables.

"Assasin" comienza con una melodía que a más de uno le recordará a la de la serie El auto fantástico. El tema continúa con una melodía un tanto psicótica y un estribillo con bellas melodías vocales, creando un tema que se mueve entre riffs oscuros y un sentimiento pesimista.

Después viene "Exo-Politics", con un riff de guitarra tremendamente rítmico, casi automático, la voz de Matt siguiendo melodías melancólicas y algo mas luminosas que en temas anteriores y cantando con pasión un estribillo con vocación de himno. En "City Of Delusion" encontramos las primeras influencias de Ennio Morricone que ya comentaron que iban a haber, en forma de sencillos pero efectivos complementos orquestales. Una canción meláncolica y desesperanzadora en la que Matt reza entre sonidos de ranchera: "Destroy this city of delusion, Break these walls down, Why do we face, Justify my reasons with your bloody hand".

En "Hoodoo" las influencias de Morricone se hacen más que patentes, cercanas incluso al flamenco en una breve introducción inicial al tema. Esto puede asustar a más de uno, pero lo cierto es que luego el tema va volviendo poco a poco a su cauce normal descubriéndonos un bellísimo tema que recuerda a "Blackout" de su anterior LP. Sensacional, fantástico corte, muy intenso, cantado por un inspirado Matt.

Por último llegamos a "Knights Of Cydonia", una composición épica con aires de spaghetti-western y una sección vocal que recuerda a los mejores Queen.Una introducción instrumental de poco más de dos minutos abre el tema, con algunos coros de Bellamy, para sumergirnos en una canción épica, con un notable trabajo instrumental, llena de cambios y con un glorioso estribillo. Inmejorable final para este excelente disco.